Entradas

El Lobo Disfrazado de Pastor


En un rincón de su madriguera, un lobo daba el toque final a un proyecto largamente acariciado.
Así pues, se disfrazó de pastor y, mientras dormía el verdadero pastor, se metió entre las ovejas, relamiéndose al pensar que los carneros estaban a su disposición.
Las ovejas, muy contentas, se agruparon junto al facineroso, creyendo estar más seguras a su lado.
El carnicero se fijó en una oveja en particular y, sin poder ocultar su entusiasmo, exclamó:
—¡Qué oveja tan gorda y sana! ¡Qué tierna y grande es! Esa sí que es bocado de cardenal. ¡Se me hace agüita la boca!
En su alegría hizo tanto ruido que despertaron el pastor y los perros, quienes, acorralando al impostor, le dieron de palos y mordiscos hasta matarlo.
Moraleja:
Entusiasmo desbordado, mata lo proyectado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario